Mejora tu técnica con estos consejos
Todo jugador de Squash debe tener una buena condición física, ya que es uno de los deportes más demandantes físicamente, donde el cuerpo se usa al máximo y que exige mucha fuerza, flexibilidad, velocidad y resistencia.
Para tener un buen rendimiento en esta dinámica disciplina, es necesario llevar a cabo un entrenamiento eficaz, completo y sólido, con rutinas de ejercicios aeróbicos y anaeróbicos
Los aeróbicos tienen beneficios cardiovasculares y te ayudan a quemar calorías; por su parte, los anaeróbicos te sirven para quemar grasa y mejorar la resistencia, además generan masa muscular.
Equilibrar ambos ejercicios te dará más probabilidades de desempeñarte mejor en la cancha, pero para eso debes contar con un instructor deportivo que te guíe con base en tus características y necesidades, con el objetivo de definir una rutina única y adecuada para ti.
Como ejercicios aeróbicos, un squashista puede correr para tener una mejor resistencia; nadar o andar en bicicleta que mejorarán la condición tanto del corazón, como de los pulmones; así como saltar la cuerda.
Por otra parte, los ejercicios anaeróbicos pueden ayudar a que tengas una pronta recuperación del aliento entre juego y juego, para eso debes trotar, caminar, hacer planchas, e incluir sesiones de estiramientos para adquirir flexibilidad, además de realizar rutinas con pesas y usar máquinas de gimnasio.